El Tribunal de Arbitraje Deportivo decidió el pasado viernes dar por impugnadas las elecciones a la presidencia de la RFEF, debido a un defecto de forma. Según fuentes del máximo organismo judicial del deporte en España a Marca, la convocatoria se realizó por la Junta Directiva y no por el presidente, Luis Rubiales, por lo que deben anularse.
El enfado de la RFEF ante esta noticia ha sido tal que han emitido un duro comunicado en el que no desmiente dicha anulación, sino la manera en la que se han enterado.
El organismo lamentó enterarse «de determinadas informaciones administrativas» que le afectan directamente «por los medios antes de por los cauces legalmente previstos», en alusión a una información publicada este lunes por Marca.
La federación señaló que no tiene constancia «de ninguna resolución del TAD en relación con las impugnaciones que se presentaron y que fueron debidamente informadas» por su parte.