El fútbol ha regresado este jueves a España con la disputa del derbi entre Sevilla y Betis en el Sánchez Pizjuán.
Con estrictas medidas de seguridad que incluyen que los suplentes no permanezcan en el banquillo sino en la grada y con mascarillas, comenzó a rodar el balón después de tres meses de parón por el coronavirus.
El equipo de Lopetegui se adelantó primero de penalti por mediación de Ocampos -primer gol de la nueva normalidad del fútbol- y, a los pocos minutos, Fernando puso el 2-0 en el marcador.
Un gol que dio alas a los sevillistas, que lo celebraron haciendo una gran piña de abrazos, algo que la Liga pidió encarecidamente que los futbolistas no hicieran para extremar las precauciones de contagio.